La halitosis es un problema que todos padecemos en algún momento de la vida; es por ello que traemos para ti algunos consejos prácticos para combatir el mal aliento y ayudarte a superarlo.
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¿Por qué se produce el mal aliento?
Aunque se llama halitosis o mal aliento a cualquier olor desagradable que proviene de la boca de una persona; según su origen, pueden clasificarse al menos 2 tipos diferentes:
Halitosis transitoria
Básicamente, es la condición que se experimenta al levantarse y/o luego de pasar varias horas sin comer, beber, hablar o asear tu boca adecuadamente; lo cual reduce el flujo normal de saliva alrededor de la mucosa bucal.
Halitosis persistente
En contraste, el origen de este problema es un poco más complejo y debe estudiarse para establecer un tratamiento eficaz; ya que suele estar asociado con alguna patología digestiva u otra complicación oral.
¿Cómo puedo combatir la halitosis?
Evita la boca seca
Una correcta hidratación a lo largo del día, además de mantenernos saludables, es la manera más simple de evitar la boca seca. Sin embargo, el consumo de bebidas alcohólicas, café, cigarrillo, ciertos medicamentos y comidas o la práctica deportiva también propician la resequedad en la boca.
Por esta razón es conveniente tomar un vaso de agua al despertar que ayude a desplazar las bacterias acumuladas durante la noche por resequedad en tu boca, consumir suficiente agua a lo largo del día e incrementar la ingesta al finalizar una sesión de entrenamiento físico.
Come regularmente y de forma saludable
Los alimentos altos en grasas, con sabores y condimentos fuertes, muy ácidos o azucarados están relacionados con la producción de bacterias que causan el mal aliento.
Es por ello que seguir una dieta sana y balanceada es en estos casos una ventaja; incluyendo frutas, granos enteros, proteínas y vegetales.
Asimismo, es recomendable que no aguardes demasiado entre una comida y otra, por supuesto en raciones moderadas (al menos 4 horas es una buena referencia). Esto no solo te ayudará a evitar el mal aliento, también favorece una mejor digestión.
Cepilla tus dientes y usa el hilo dental
Entre los hábitos de higiene bucal, un correcto cepillado de los dientes al menos 2 veces al día acompañado del uso regular del hilo dental, son grandes aliados en la lucha contra la halitosis.
Así como tu alimentación e hidratación afectan el olor de tu boca, no hay consejos prácticos para combatir el mal aliento que funcionen eficazmente si no están acompañados de buenos hábitos de higiene.
Indiscutiblemente el hilo dental es clave para remover partículas difíciles de alcanzar; lo que hace de éste un complemento perfecto al trabajo que realiza el cepillo de dientes.
Recuerda limpiar tu lengua
Así como nos enfocamos en la limpieza de los dientes, también se debe ocupar el tiempo suficiente para limpiar la lengua.
Sin duda, ésta es una cama en donde reposan los aminoácidos y las bacterias responsables del mal olor; por lo que debes asegurarte de cepillarla con cuidado o usar el limpiador de lengua que muchos fabricantes ya han incorporado al cepillo dental.
Cambia regularmente tu cepillo de dientes
Antes que nada, el cepillo de dientes es una herramienta de uso frecuente que por supuesto presenta deterioro en un lapso bastante corto.
Por consiguiente, no basta lavarlo todos los días; la recomendación general es cambiar el cepillo dental cada 3 o 4 meses e incluso antes si lo consideras necesario.
Uso de la crema dental y el enjuague bucal
Primeramente mencionamos el cepillo e hilo dental como instrumentos para lograr una buena higiene bucal, pero estos deben estar acompañados de productos que garanticen su efectividad.
De tal manera que la selección del dentífrico y el enjuague bucal adecuados, debe incluir productos que señalen la presencia de flúor en su fórmula y posean propiedades antibacterianas que no solo combatan la halitosis; sino también la placa, caries y enfermedades periodontales.
Cuida tus prótesis y/o aparatos de ortodoncia
Si utilizas una prótesis, ortodoncia o algún otro tipo de tratamiento intraoral, debes ser especialmente cuidadoso con la limpieza.
Seguramente tu odontólogo ha sido muy preciso en el procedimiento y el tipo de productos que puedes utilizar para hacerlo. Recuerda que estos elementos son capaces de alojar bacterias que provocan mal aliento y que además pueden causar otras enfermedades o complicaciones.
Visita regularmente al odontólogo
Durante tus visitas de control, el especialista puede detectar cualquier novedad en tu boca o simplemente hacer tratamientos de rutina, entre los que obviamente se incluye la limpieza profunda.
De hecho, es probable que el origen del mal aliento se encuentre relacionado con alguna enfermedad periodontal; en cuyo caso deberás recibir tratamiento para corregir el problema.
Por otro lado, algunos tipos de halitosis severa solo pueden controlarse aplicando tratamientos mucho más específicos. En estos casos, tu odontólogo puede determinar las causas con algunos análisis o referirte de ser necesario, a otro tipo de especialista.
Evidentemente, con estos consejos prácticos para combatir el mal aliento podrás mantener tu boca fresca y saludable por mucho más tiempo; en tanto que si tu halitosis persiste, podrás contar con el apoyo especializado que te ayudará a encontrar una solución favorable a ese problema.